Cóctel: Martini Llama del Amor
martes, julio 11
No he tenido tiempo de escribir en mi diario íntimo y personal a causa de las múltiples ocupaciones que me han entretenido últimamente. Pero ya estoy aquí, y he decidido deleitaros con el cóctel que me preparó Alessandro el día de la verbena. Ese fue su particular regalo de cumpleaños para mí y, aunque parezca increíble y desafíe completamente la lógica, era la primera vez que lo probaba. Su sabor no sólo era delicioso sino que se vio ensalzado por el placer de beberlo mirando a los ojos del chico martini con mi brazo entrelazado al suyo.
Alessandro me contó que la receta surgió en el Chasen's de Beverly Hills, un exclusivo punto de encuentro para las estrellas de cine, políticos y otras influyentes personalidades en el que se toman los más exquisitos cócteles de mano de su fantástico barman, el mítico Pepe Ruiz. Resulta que un día el actor Dean Martin le pidió a Pepe, en confianza, que creara un cóctel inspirándose en él, y el barman cogió una naranja y puso sus manos a crear magia. He decidido que yo también le pediré a Pepe que cree un cóctel inspirándose en mí la próxima vez que vaya a Beverly Hills, pues me encanta lo glamouroso de la idea, queridos. Cuando Frank Sinatra probó la bebida le gustó tanto que dijo: "Pepe, invita a todo el bar a ese cóctel". De repente el Chasen's se convirtió en una improvisada fiesta con un insólito encargo para el barman: nada menos que doscientos Flame of Love Martinis, uno para cada una de las doscientas personalidades que estaban en ese momento en allí. ¿No os parece una historia sencillamente genial?

- 74 ml. de vodka
- Una o dos naranjas
- Una gota de exclusividad
- Adorno: peladura flameada de naranja
- Cristalería: copa de martini
Lavar las naranjas con agua abundante y secarlas bien. Poner un poco de jerez fino en una copa de martini fría y hacerlo girar hasta bañar todo el interior, después vaciar la copa del jerez sobrante. Cortar la piel de las naranjas en tiras y después exprimirlas. Calentar el aceite obtenido en la llama de una cerilla para caramelizarlo y bañar el interior de la copa con él. De la misma manera se flamea la piel de naranja. A continuación, se agita una parte de vodka en una coctelera y se filtra sobre la copa de martini. Poner de adorno la piel de naranja y sentir en el corazón el fuego de la llama del amor. Ideal para un encuentro amoroso.
Etiquetas: Cócteles
miércoles, julio 12, 2006 3:03:00 p. m.
Me ha encantado la sugerencia Pam, quizás cambie mi favorito "Martini Heaven Mint" por tu "Flame of love Martini". Sobre todo para un momento romántico y delicioso ... mmmmmmmmmm...
Será mejor que Zeus se abstenga de probarlos, ya tiene suficiente calentura cuerperil JAJA, bueno, al menos eso es lo que va diciendo por ahí (perro ladrador poco mordedor).
Vaya tela, esto del glamour se pega Pam, releyendo el principio de mi comentario resulto pija e incluso pedante, no crees? En cualquier caso, no puedo negarte que resulta gratificante tomarse un vermouth los sábados y/o domingos a eso de las 12:30/13:00 p.m., sobretodo si es martini, en buena compañia, cerca de la playa, sólo reflexionando o, ni siquiera eso, tan solo disfrutando de ese momento de serenidad (...)